Sting ha rendido homenaje a los 43 estudiantes de la escuela normalista desaparecidos en septiembre de 2014. Lo ha hecho en México, en el Auditorio Nacional, como broche final de un concierto que marcará un antes y un después en muchos mexicanos. El cantante aprovechó el último tema de su show para ponerse una camiseta blanca que rezaba «Ayotzinapa» y que, además, llevaba fotografías de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero. Sting, con una guitarra acústica, les regaló su emotivo Fragile, tema que entre sus mensajes deja el de “nothing comes from violence and nothing ever could” (nada se obtiene de la violencia y nunca lo hará).
Además, según informan desde Amnistía Internacional, antes del concierto el astro británico se reunió con padres de los 43 estudiantes desparecidos. Durante esta reunión, activistas y familiares compartieron con el músico su preocupación por la desaparición de los 43 estudiantes y, en sentido amplio, de las desapariciones en el país mexicano, y pidieron solidaridad internacional.No es la primera vez que lo hace, en 2015 (en el marco de la campaña #Noesnormal de Amnistía Internacional) el cantante se encontró también con los padres de los 43 estudiantes y conoció de cerca el dolor de los familiares de los desaparecidos. “No es difícil imaginar la angustia y el tormento que sufren las familias cuando un ser querido desaparece sin rastro o explicación, cuando intentan encontrarlos o saber qué pasó con ellos y se frustran con la aparente indiferencia de las autoridades ante una situación que ha llegado a niveles epidémicos en México,” dijo Sting. “Me reuní con algunas de las familias, pero son sólo la punta del iceberg. Hago una llamada al gobierno de México para que le den seguimiento a estos casos de manera más vigorosa, que encuentren y lleven a la justicia a las personas responsables y que prevengan, mediante legislación, este tormento de desapariciones y abusos a los derechos humanos.”