Isidre y Dolors Orrit: 12.050 días desaparecidos
LOS BUSCARÁN MIENTRAS VIVAN
Desaparecieron juntos de la habitación del hospital de Manresa en el que estaba ingresado el pequeño de 5 años. Su hermana se había quedado esa noche a cuidarlo. Hace 33 años que los buscan
MAYKA NAVARRO | BARCELONA
Una desaparición es mucho peor que una muerte. No hay lugar al que llevar flores. Y cada año que suma la ausencia aparecen nuevas preguntas que se pierden sin respuestas en el aire. Ya son 33 los años que han transcurrido desde que los hermanos Isidre y Dolors, que tenían 5 y 17 años, se esfumaran de la habitación 229 del hospital Sant Joan de Déu de Manresa en la que la mayor cuidaba aquella noche del pequeño.
María Orrit y Alfredo Pires tuvieron 15 hijos. Ni dos meses habían pasado de la muerte del padre por un cáncer, que la madre llevó al pequeño al hospital por unas úlceras que le habían aparecido en la boca. Isidre se quedó ingresado por una reacción alérgica a la penicilina y las hermanas se turnaron por las noches para cuidarlo. La tercera noche le tocó a Dolors. Al día siguiente, en la mañana de aquel 5 de septiembre de 1988, un guardia urbano de Manresa llamó al timbre del piso de la familia para preguntar por Isidre. “Está en el hospital con su hermana”, aseguró la madre. En todos estos años María Orrit ha enterrado a tres hijos: Angelina, Montserrat y Manel. Octogenaria y castigada por el sufrimiento, la mujer se resiste a que terminen sus días sin saber que pasó con Dolors e Isidre.
Un informante dice ahora que él estuvo esa noche en el hospital y vio cómo raptaban a los niños
Eran otros tiempos. Pero duele igual el maltrato que sufrió la mujer a la que prácticamente ninguneó todo al que acudió para pedir ayuda. Ni el médico ni el director del hospital quisieron recibirla. Un detective sin escrúpulos le estafó 50.000 pesetas con las que se esfumó sin aportar ni un dato sobre el paradero de sus hijos.