
«Hoy queremos compartir con ustedes su mundo, el mundo de David, que también fue el nuestro. Dejen en la puerta los tópicos y las historias esotéricas. Simplemente acompáñennos en este viaje a una época que se fue para siempre. Miren lo que creó nuestro hermano. Escuchen su voz. Sorpréndanse, inspírense. Hagan memoria».
Jorge y Raúl Guerrero Guevara